Hemos visto cómo la situación económica y la desesperación ha llevado a miles de personas a migrar en busca de un futuro medianamente esperanzador. Exponiéndose durante el proceso a situaciones extremas, llegando a arriesgar hasta su propia vida y la de sus familiares. Explorar maneras en las que podemos ayudar a refugiados en su nueva vida.
Es evidente, que la migración en los últimos meses se ha incrementado. Vemos como anualmente, numerosos individuos abandonan sus residencias en Latinoamérica, el Caribe y otras zonas, en busca de lograr sus sueños.
Razones como la situación económica, el limitado acceso a la educación y empleo, la violencia y aspectos estructurales y personales han impulsado a personas de diversas partes del mundo, especialmente de naciones del Sur y Centro Americana, a buscar nuevas oportunidades en Estados Unidos y Otros países.
Por otra parte, son pocos los que tienen la fortuna de tener un familiar en el exterior que pueda someter alguna petición de visa para poder emigrar e iniciar una nueva vida. Sin embargo, no todos cuentan con ese recurso; por el contrario, la gran mayoría deben aventurarse en viajes extensos y peligrosos, conscientes del alto riesgo que esto conlleva.
Nuevos procesos de reunificación en estados Unidos
Además, con la implementación de nuevos procesos de reunificación dentro de Estados Unidos, como la ampliación del programa FRP, que originalmente aplicaba a Cuba y Haití y que ahora brinda esta oportunidad a individuos provenientes de Colombia, El Salvador, Guatemala y Honduras. La migración evidentemente ha experimentado un incremento notable.
Claramente, el propósito fundamental de esta iniciativa es la de enfrentar el crecimiento de personas que buscan reunirse con sus familiares en la frontera sur, pero que se ven retrasados por largos plazos de tramitación y otras dificultades.
Por otra parte, no podemos pasar por alto la creciente situación que se hace cada vez más evidente, la cual impacta no solo a las principales ciudades de este país, sino también al mundo en su conjunto. Específicamente, el asunto de los refugiados provenientes de Venezuela y Ucrania, que ha adquirido un alcance global, exigiendo que mostremos nuestro lado humano para brindar ayuda a esta población tan vulnerable hoy día.
Reflexiones ante la dura realidad de los refugiados
Exploremos, la manera en que las comunidades de acogida pueden brindar una cálida bienvenida y ayudar a los refugiados como a los migrantes que se encuentran en sus países actualmente.
Aunque los términos «refugiados» y «migrantes» no sean idénticos en significado, el hecho de que estos dos grupos necesitan de nuestra colaboración, independientemente a la que el gobierno les proporciona.
Está en nuestras manos evitar que esta situación evolucione hacia un desafío social dentro de nuestra comunidad, y más bien, debemos asegurarnos de que este grupo de individuos, logre una adaptación fluida y un desarrollo positivo.
Existen muchas formas de ayudar a refugiados e inmigrantes
No Juzgar
Es importante, informarse acerca de las razones por la que estas personas han abandonado sus países, arriesgándose a múltiples situaciones peligrosas con su familia tratando de buscar un mejor futuro.
Cada uno de nosotros puede tener un papel esencial en combatir la desinformación que circula acerca de los refugiados. Para empezar, es fundamental comprender los datos reales y el proceso de reubicación.
Según la Agencia de las Naciones Unidas para los refugiados, conocida como ACNUR, se considera refugiado a aquel individuo que huye o experimenta un genuino temor de ser perseguido debido a motivos de raza, religión, nacionalidad, opiniones políticas o pertenencia a un grupo social específico, en caso de permanecer en su país de origen.
Demostrar apoyo en la reubicación
Una manera fácil de respaldar los derechos de ellos, consiste en establecer comunicación con nuestros representantes en el Congreso, informándoles de nuestro apoyo a la llegada de refugiados al lugar en donde vivimos.
Es fundamental que los líderes electos tengan conocimiento de la disposición de sus votantes para recibir a los refugiados. Este gesto se puede llevar a cabo mediante una sencilla llamada telefónica, un correo electrónico o una carta.
Brindar patrocinio a un refugiado
En los Estados Unidos, varias agencias cuentan con licencia para el reasentamiento de refugiados. Su función es apoyarlos durante el proceso de integración y adaptación en la nueva comunidad. Brindándoles ayuda en aspectos esenciales como la búsqueda de vivienda y empleo.
Estas agencias necesitan de colaboradores en la comunidad para lograr su misión. Por ejemplo, vemos como personas e iglesias se ofrecen voluntariamente para dar la bienvenida y cuidar a familias recién llegadas.
Otras formas de ayudar, pueden ser participar como guías locales, asistir con el transporte, brindar cuidado infantil cuando sea necesario, facilitar la práctica del inglés y, en resumen, ser amigos y vecinos solidarios según las necesidades.
Contribuir financieramente o proporcionar artículos esenciales a las organizaciones de reasentamiento.
En este punto es donde más personas podemos colaborar a los refugiados, ya que son acciones que están al alcance de todos, obteniendo un resultado favorable para toda la comunidad y de paso marcando una gran diferencia.
Aunque no puedas patrocinar directamente a un refugiado, existen diversas formas de brindarles una cálida bienvenida. Una opción es colaborar con las agencias que recolectan paquetes para aquellos refugiados que acaban de llegar. Elementos esenciales para el hogar, cómo utensilios de cocina, sábanas o cubiertas, productos básicos de higiene y ropa en buenas condiciones.
Siempre podemos dar una mano
Según Megan Brown, directora del centro de reasentamiento de refugiados de Bethany en Lancaster, el apoyo económico proporcionado por el gobierno de los Estados Unidos a menudo no cubre las necesidades materiales iniciales de estas familias, llegando incluso a ser insuficiente para costear el depósito de un apartamento.
Los paquetes de bienvenida son para ayudar a los refugiados, dándoles un respiro y permitiendo que se concentren en su adaptación, sin preocuparse por la espera de un cheque para cubrir sus necesidades básicas.
Además de las donaciones materiales, las agencias de reasentamiento también dependen de la generosidad financiera de donantes para mantener sus programas y proveer a los refugiados con los servicios esenciales para su integración y desarrollo en las nuevas comunidades.
Al aportar a estos programas, los donantes contribuyen a brindar apoyo a los refugiados, transmitiéndoles un mensaje de que son bienvenidos.
Ayudar a los refugiados es un deber de todos, nunca sabemos las vueltas que la vida va a dar y en algún momento, podríamos llegar a estar en esta situación difícil y agradeceríamos mucho que alguien nos diera su apoyo.
Nuestra dedicación a la comunidad refleja nuestro compromiso. Las acciones que realicemos en estas situaciones marcarán la diferencia en el progreso de la localidad y en la prevención de problemas sociales a futuro.
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Sobre el autor
Mónica Sanabria
Comunicadora Social y Periodista con Maestría en Relaciones Internacionales. Extensa trayectoria en medios de comunicación (prensa, radio & TV). Community manager, creadora de contenido, editora, diseñadora gráfica y fotógrafa. Dirige su agencia desde el 2023.
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