Sin lugar a dudas uno de los mayores capitales con los que cuenta Colombia es su acervo cultural y las tradiciones que de las manos de los indígenas y artesanos de todo el país, han convertido la nación en un referente internacional en el campo de los accesorios, las artesanías y la joyería.
La tendencia parece decir que los artesanos colombianos están cada vez mejor preparados para hacer frente al mercado internacional y que iniciativas como ProExport han facilitado muchísimo las cosas para que los productos tradicionales colombianos circulen alrededor de todo el mundo.
Artesanías y accesorios colombianos en Europa
Gracias a la gestión de entidades público-privadas como Artesanías de Colombia y a la gestión del Sistema de Información para la Artesanía (SIART), Colombia ha dejado de ser percibido como un país donde la artesanía tenía un matiz estrictamente pintoresco y se ha convertido en un referente de buenas prácticas para con los artesanos y la conservación de técnicas milenarias.
Es así como, en el marco del Año de Colombia en Francia, tres artesanas colombianas viajaron a finales del año pasado a París, con el propósito de demostrar sus habilidades y de posicionar el trabajo de los artesanos nacionales en el mercado Europeo. El evento principal consistió en una demostración en el emblemático Le Carreau du Temple donde las colombianas fueron vitoreadas.
Las elegidas para representar a Colombia en el evento fueron Fanny Iguarán, artesana experta de la comunidad Wayúu, María Stella Cabrera, artesana especializada en tejeduría en palma de iraca y finalmente Magdalena Chicunque, artesana experta en tejido con chaquiras de la comunidad Kamënsta del alto Putumayo.
No obstante, la presencia de las artesanías colombianas en Europa no se detuvo con la macrorrueda de negocios que acompañó el Año de Colombia en Francia, de hecho, en septiembre de 2018, en el marco del Maison&Objet París 2018, uno de los eventos de diseño interior y estilo de vida más importantes a nivel mundial, los accesorios y artesanías colombianas volvieron a destacar
Esta vez, fueron los ‘canastos cuatro tetas’ elaborados en paja tetera y que hacen parte de la tradición indígena Eperaara Siapidaara, la cerámica tradicional de La Chamba, Tolima y los ‘Cestos de Guacamayas’ de Boyacá fueron los protagonistas.
La Quinta Avenida también recibió a nuestros artesanos
Si te parece impresionante el desempeño que han tenido los artesanos colombianos en Europa, posiblemente el hecho de que cinco accesorios ‘made in Colombia’ hagan parte del catálogo de verano de Bergdorf Goodman, una de las tiendas departamentales más importantes de Estados Unidos, te va a dejar sin palabras.
El grupo de artesanías colombianas seleccionadas por la curadora Linda Fargo comprende el sombrero vueltiao, una cartera desarrollada en conjunto por el programa Moda Viva de Artesanías de Colombia y varias artesanas Wayúu, un clutch elaborado en Cumbal, el canasto «cuatro tetas” que tanto brilla en Europa y el sombrero de Martín Pescador.
Los artesanos colombianos que brillan en los aparadores de Nueva York son Blanca Tarapues, Olga Goriyu y Ferney Mejía, todos ellos recibieron asesoramiento oficial para poner sus productos en las vitrinas de Bergdorf Goodman y hacen parte de una tendencia que de acuerdo con ProColombia, sugiere el incremento sostenidas en las exportaciones de artesanías.
De hecho, en 2010 Colombia exportó 13,100 millones de pesos en este rubro y esa cifra subió a 25,400 millones de pesos en 2017, la proyección oficial es que en 2018 se exporten por lo menos 30,000 millones de pesos y logren colonizarse nuevos mercados, no sólo en Europa y los Estados Unidos, sino también en Asia.
El futuro de los accesorios y las artesanías colombianas
Curiosamente aunque las artesanías colombianas ganan terreno en el extranjero y los mercados más grandes del mundo tienen sus puertas abiertas para nuestros productos, el mercado local aún no es lo suficientemente robusto para garantizar la continuidad de algunas técnicas tradicionales y sobre todo, de los artesanos que no están insertos en el circuito comercial predominante.
Antes de pensar en un salto hacia Asia o de colonizar de maneras más agresivas el mercado europeo y norteamericano, el reto consiste en que los colombianos reconozcamos el valor que tienen los productos que salen de las manos de nuestros artesanos. Es desde un mercado interno más fuerte, que podemos garantizar el éxito de nuestros productos en el extranjero.
El futuro inmediato de los artesanos está en los laboratorios de innovación y diseño que empiezan a aparecer por todo el país y sobre todo, en la explotación de las ‘denominaciones de origen’, que orgullosamente 14 artesanías colombianas ya obtuvieron. En un escenario cada vez más global, son los atributos locales los que nos diferencian.
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