Los hispanoamericanos compartimos muchas cosas, pero lo que más nos une es precisamente el idioma que todos hablamos. El español es el idioma oficial de más de 21 países alrededor del mundo y además es el segundo idioma más hablado en todo el planeta, después del chino, pues se calcula que unos 483 millones de personas tienen al castellano como primer idioma. Sin duda alguna nuestra lengua ha servido de agente conector de países, culturas y ahora generaciones que se comunican en tiempo real a través de la magia del internet.
Sin embargo, la gran diversidad de países conectados por el español permite también la variación en muchos términos, expresiones y el uso de palabras para referirse a un mismo objeto o aspecto. A estas expresiones, palabras o conjuntos de palabras cuyo significado no puede deducirse de las palabras que lo conforman, se conocen como ‘modismos’. Son muchos los modismos que están regados por toda América Latina, pero quienes hemos vivido o vivimos por fuera de Colombia sabemos bien que nuestro español es especialmente conocido por tener palabras que no se conocen o no se usan igual en ninguna otra parte del mundo. Como prueba traemos una pequeña selección de esas palabras que solo usamos nosotros, y que seguramente usted ha dicho alguna vez.
Tusa
A mediados de 2019, las cantantes Karol G y Nicki Minaj pusieron al mundo a bailar con su éxito ‘Tusa’, pero en realidad muy pocos sabían a lo que se referían. Los colombianos hablamos de ‘tusa’ para referirnos a una decepción amorosa, al despecho. Por supuesto, la palabra tiene sus derivados: entusado y entusada, por ejemplo.
Guaro
Definitivamente una de nuestras palabras favoritas, el término con el que coloquialmente se conoce al aguardiente, trago que no puede faltar en fiestas conciertos y celebraciones en general. Es tradición que no solo enseñemos la palabra, sino les demos de probar a nuestros amigos extranjeros.
Guayabo
La conocida resaca, que también tiene otros nombres en diferentes países, para nosotros es el “guayabo”, y es muy probable que te de la mañana siguiente de pasarte de tragos con el guaro.
Bollo
Esta es un poco controversial porque significa diferentes cosas dependiendo de en qué parte del país se diga. Para alguien del interior significa un problema muy grande y… otra cosa que mejor no decimos. Pero un bollo en el Caribe se come, porque es un producto hecho con masa que puede ser de maíz o coco; y también se usa como piropo. Si estás en la costa y te dicen que eres un “bollito”, alégrate
porque te dijeron hermosa.
Parche
Los grupos de amigos tienen distintos nombres en todas partes del mundo: “gang” para los norteamericanos, “banda” le dicen los mexicanos, y en muchas partes de Colombia los grupos de amigos se conocen como ‘parches’. No los que les pegas a la ropa, pero sí los que andan pegados para todas partes.
Rumbear
Es una de las cosas que haces con tu parche. Rumbear, más allá de irse de fiesta es disfrutar todo el proceso: desde arreglarse para salir, hasta la ‘prerumba’ y por supuesto la fiesta en si. Rumbear es enfiestarse, pero también tiene otra connotación: si alguien te dice que se “rumbeó” a alguien quiere decir que se pusieron románticos… tal vez en medio de la rumba.
Tinto
Esta explicación viene con historia. Alguna vez, un colega periodista que visitaba Bogotá me preguntó por qué en Colombia estaba bien visto tomar alcohol desde tempranas horas de la mañana. Extrañada, le pedí que me explicara porque eso no era así, y me contó que había visto a todo el mundo hablando de tomar “tinto” en la mañana. Después de reír un rato le expliqué que, a diferencia del resto del continente, nuestro tinto no es el vino, sino el café que tomamos a cualquier hora del día.
Líchigo
Palabra también muy popular en el Caribe, aunque es conocida a nivel nacional. Un líchigo es una persona tacaña, y es algo que no solo es motivo de crítica sino de burla, especialmente cuando estás con tu parche y no quieres aportar para la rumba.
Lobo
Algo ordinario o vulgar en Colombia puede tener muchas denominaciones. Lobo es presentarse en una fiesta sin ser invitado… o ponerse vestido corto en un evento formal. Esta palabra tiene muchos sinónimos en nuestra lengua y varía también de acuerdo a la ciudad o territorio: véase “corroncho”, en el Caribe, “mañé” en Bogotá, o “grilla” en Medellín.
Recocha
Un desorden que puede tener connotación positiva o negativa sigue siendo un desorden. Y para los colombianos es una recocha. Es más, cuando estábamos en el colegio los profesores nos pedían que dejáramos la recochita o, en el peor de los casos, la “guachafita”.
Definitivamente podríamos hacer una lista de mucho más de 10 palabras, y es unas de las cualidades más especiales de nuestro idioma, que varía y se nutre de nuestras tradiciones populares. Cuéntennos,
para ustedes ¿cuál es el modismo más colombiano de todos? Tal vez podemos incluirlo en una próxima
ocasión y construir un diccionario propio, pintoresco y lleno de sabor colombiano.